Jardín acuático, placer cotidiano

La belleza de un jardín acuático consiste en la suma de un diseño bien logrado y de plantas adecuadas, que serán ubicadas dentro y fuera del lugar.

El agua es uno de los elementos del diseño que mas se utilizan en paisajismo actual, porque produce placer y terapia para el que vive y disfruta de esto. El trabajo de un lugar que alberga el agua es mucho más fácil de lo que parece.

Medio barril, una maceta suficientemente amplia, una excavación recubierta por membrana, plástica o un estanque realizado en material, son algunas de las alternativas posibles de plantar juncos, cola da caballo, nenúfares, entre especies vegetales o bien unos pececitos de colores.

EL lugar elegido para el agua será capaz de aportar movimiento, reflejo, sonido, y vida. A su vez aporta al jardín una serie de animales que podremos convivir y manejarlos dentro del ecosistema que armemos.

Bajo la denominación de jardín acuático se esconde cualquier espejo de agua en el cual crezca alguna forma de vida vegetal. Puede tener cualquier tamaño y diseño, ser pequeño o grande, estar al ras del suelo o elevado, dibujar formas regulares, irregulares o geométricas, tener los bordes bien delineados, o mimetizarse con el entorno. La particularidad del diseño estará dictada en cada caso por el predio en el cual será emplazado y la libre decisión de su dueño. También existen otros espejos de agua como las fuentes y cascadas, que a pesar que no engendran vida vegetal, aportan belleza, sonido, paisaje y se transforman en puntos focales dentro del jardín.

Macetas y recipientes Se trata de mini estanques portátiles, las plantas que se colocan deben tener un tamaño que sea acorde ala superficie del mismo. Son útiles porque no requieren ningún tipo de construcción. En la actualidad se utilizan mucho en decoración, hay un diseño para cada estilo ya que se trata de un arreglo temporario. Los encontramos de distintos materiales cerámica, hierro fundido, cemento, etc. Nymphaea pigmea, azolla salvinia, repollito de agua, entre otras.

Fuentes y juegos de agua Una fuente es una estructura de la cual brota una cierta cantidad de líquido, que es recogido en un recipiente previsto para ese fin. El agua surge de ella de mil formas chorrear, gotear, burbujear, derramarse, etc. El sonido que aporta al jardín puede ser un suave murmullo o un energético fluir. Las paredes de esa fuente pueden convertirse en un bello escenario. Lo que se necesita es un recipiente, una bomba y una instalación eléctrica que mueva el sistema de bombeo. El agua en movimiento bombea oxígeno y humedad al aire, creando así una atmósfera refrescante.

Canales, arroyos, escalones y cascadas Pueden ser interesantes componentes de la jardinería acuática. Su instalación está directamente asociada con una fuente de electricidad y una bomba de recirculación. Si el diseño es formal y geométrico hablamos de canal, si presenta desniveles estamos ante la presencia de escalones. Si el desnivel es pronunciado, con rocas colocadas al azar, hablamos de una cascada.

El diseño de un estanque estará determinado por nuestro propio gusto. Puede ser a nivel del suelo o tener paredes elevadas. Pueden estar construidos de cemento y mampostería o surgir a partir de una excavación forrada con láminas de PVC, o enterrando algún recipiente apto para tal fin. Las lagunas naturales son propias de zonas con depresiones en las que se acumula el agua ya sea pluvial o surgente, suelen tener grandes dimensiones. Estas características se aprovechan para crear un un estanque o lago. También se pueden utilizar o adaptar cursos de agua, zonas de drenaje natural, embalses.

Llamamos complementos de estas formas mencionadas anteriormente a los bordes, caminos, puentes, decks, esculturas, fuentes, iluminación, etc. cada uno de estos elementos se trabajan en forma particular de acuerdo al diseño elegido y al estilo de la casa. Piedras, maderas, objetos de arte son algunos elemetnos con los que podemos trabajar para armonizar un lugar de encanto.

El modo en que llevemos a cabo la plantación de las especies que poblaran nuestro estanque determinará en gran medida su éxito o fracaso. Cada uno de estos grupos de oxigenadoras, flotantes, sumergidas y palustres tiene sus propios requerimientos de plantación que nos permitirán optimizar su mantenimiento y logrará que desplieguen toda su belleza.
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