30/9/08

Decálogo sobre el agua de la cuenca del Segura

El decálogo se marca como objetivo despolitizar el tema del agua, como “bien de dominio público de titularidad estatal”, constata que la cuenca del Segura es la única de España con un el déficit estructural de agua, y contempla como igualmente válidas la obtención de recursos hídricos a través de la desalación, la interconexión de cuencas o la reutilización.

El decálogo aprobado en Elche trata de imponer la racionalidad en el debate sobre un recurso “esencial e insustituible para la vida”, descabalgarlo de los debates partidistas del momento y aboga por un Pacto de Estado sobre la Planificación Hidrológica Nacional.

Manifiesto político de apoyo al decálogo aprobado por el Comité de Crisis de la Cuenca del Segura:

1.- El agua es un bien de dominio público de titularidad estatal, que no conoce de fronteras, territorios ni limitaciones político-administrativas. Su gestión integral debe abordarse a partir de las cuencas naturales, ordenando los recursos y demandas existentes y teniendo como fin superior atender al conjunto de necesidades y usos para satisfacer el interés general.

2.- El agua es un recurso esencial e insustituible para la vida, el mantenimiento del medio ambiente, la ordenación y desarrollo territorial, la actividad económica y el empleo. El agua en España es sin embargo un recurso escaso y con desigual distribución geográfica, existiendo en la actualidad periodos de sequía cada vez más acentuados. Corresponde a los poderes públicos, y especialmente al Gobierno de la Nación, garantizar su disponibilidad en condiciones adecuadas de cantidad y calidad, así como a un coste asequible para cada uno de los usos.

3.- La eficacia y eficiencia en la gestión del agua, el control y ordenación de las demandas, la depuración, regeneración y reutilización, el uso sostenible del recurso y el máximo cuidado del medio ambiente deben constituir los principios rectores de la política hidráulica. Las medidas de ahorro en todos los ámbitos de consumo y la mejora de las tecnologías deben ser objeto de una atención constante y prioritaria.

4.- La politización territorial del agua está dando lugar a graves tensiones que generan problemas de insolidaridad. Resulta imprescindible un Pacto de Estado sobre el Agua que establezca las líneas maestras de su utilización y permita un aprovechamiento racional y consensuado de todos los recursos hídricos en el conjunto del Estado.

5.- La desalación constituye una tecnología de gran importancia para la obtención de nuevos recursos hídricos con los que se puede atender la demanda del abastecimiento humano, industrial y del sector servicios. Los costes actuales del agua desalada impiden sin embargo que pueda constituir una alternativa económicamente viable para la actividad agraria, si bien puede ser un recurso complementario a dicho fin, siempre que la disposición mayoritaria de aguas continentales permita una moderación de los costes.

6- La interconexión de cuencas hidrográficas debe ser considerada como una alternativa más para superar los déficits de agua existentes en el conjunto del Estado. Cualquier transferencia de recursos excedentarios debe basarse en la preferencia de la cuenca cedente, con la debida garantía de todas sus demandas actuales y futuras, incluidas las medioambientales, y con respeto a los principios de solidaridad, sostenibilidad, racionalidad económica y vertebración del territorio.

El ámbito interterritorial de los trasvases, y su materialización en un espacio temporal que abarcaría más de una legislatura, con la previsión de mayorías parlamentarias de distinto signo político, constituye la razón fundamental que justifica la necesidad de un Pacto de Estado sobre la Planificación Hidrológica Nacional.

7. La Cuenca del Segura es la única en España que tiene reconocido un déficit estructural de recursos, requiriendo para su solución una especial actuación y el consenso de todos los poderes públicos. En el vigente Plan Hidrológico de Cuenca, actualmente en revisión, dicho déficit se cifra en la suma de 460 Hm3 anuales, contando con la disponibilidad íntegra de los 600 Hm3 procedentes del trasvase Tajo-Segura.

8.- La Cuenca del Segura se encuentra a la vanguardia en la implantación de medidas de ahorro, eficiencia y reutilización del agua, las cuales sin embargo no pueden nunca suponer una solución definitiva para el acusado déficit estructural existente.

9.- El trasvase Tajo-Segura constituye una obra vital para Murcia, Alicante y Almería, al resultar imprescindible para el abastecimiento humano y sobre todo para el regadío. El mantenimiento de este trasvase y de sus actuales normas reguladoras, así como la consolidación de los derechos derivados de las mismas, constituye un objetivo primordial e irrenunciable, por lo que se ejercerá la más firme oposición a cualquier propuesta o actuación en su contra.

10.- Consideran los abajo firmantes que la solución al déficit estructural de la Cuenca del Segura debe basarse, junto con las medidas de ahorro y eficiencia en el uso del agua, y el mantenimiento y consolidación del Trasvase Tajo-Segura, así como en una nueva transferencia de recursos externos derivada de la interconexión de cuencas, y en el fomento de la desalación.
Vía>>

No hay comentarios: